lunes, 7 de julio de 2014

¡Es el fin del mundo (otra vez)!

Algo terrible acontece y la humanidad tiene que enfrentarse a una nueva etapa, una donde evitar la extinción es la prioridad número uno. ¿Os suena esta premisa? Sí. Podría referirse a ‘The 100’, donde unos adolescentes se instalan en un planeta Tierra post-apocalíptico, radioactivo y peligroso; puede hablar de ‘The Walking Dead’ y su amanecer zombie; es la invasión extraterrestre de ‘Falling Skies’; y finalmente también sirve para describir ‘The Last Ship’, la mayor propuesta del canal TNT para este verano.

Estos ejemplos demuestran la tendencia superlativa de la televisión. Si tienes un concepto, llévalo al extremo y que sea el fin del mundo día sí y día también en la televisión. Pero también explican de forma inconsciente la mayor impresión que deja esta última serie. Tendrá matices distintos pero ya la hemos visto. Es un déjà vu constante y esto, de cara a decidir si subirse al carro de una nueva ficción o no, no es el activo más atractivo.

La excusa esta vez es un barco militar que navega por aguas árticas durante días. En este tiempo por el planeta se ha extendido un virus que ha eliminado la mayoría de la población, derribando gobiernos y convirtiendo el planeta en una anarquía en estado terminal. Justamente ellos, sin saberlo, tenían a bordo la científica encargada de estudiar la enfermedad y encontrar una cura y, mientras asumen que sus seres queridos ya no existen, deben sobrevivir mientras buscan la solución. El mundo jamás será aquel en el que habían vivido pero por lo menos la raza humana podrá sobrevivir.

La situación de una unidad militar separada del mando con un capitán que debe tomar todas las decisiones recuerda a ‘Last Resort’. Hubo un virus que también podía acabar con la especie humana si lograba escapar de la Antártida, el de ‘Helix’ de SyFy. Y cualquier escena de extinción de recursos y paradas obligatorias para repostar la hemos visto en las series post-apocalípticas (incluyendo otras como ‘Under the dome’ y ‘Revolution’).

Si le sumamos que ‘The Last Ship’ es bastante convencional en su puesta en escena y la presentación de la premisa, seguirla no es una idea demasiado atractiva. ¿Hasta qué punto podemos tragarnos la misma historia si no aporta un toque distintivo? ¿Y en qué realidad alternativa tenía sentido contratar a Eric Dane y Adam Baldwin para la misma serie? Probablemente Meryl Streep pierde un año de vida cada vez que estos dos comparten escena, sueltan voces rasgadas para parecer actores de carácter y de paso demuestran ser unos actores nefastos. Bueno, es que ni puede decirse que lo suyo es interpretación.

2 comentarios:

saulhe811 dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
saulhe811 dijo...

esta pelicula me encanta es como El viaje de Chihiro es brutal la recomiendo así como esta